El PP parte con ventaja en una competición a tres bandas
La encuesta que publica EL PERIÓDICO pone nuevamente de manifiesto que las próximas elecciones generales dejarán un Congreso más fragmentado que nunca. El máximo favorito para obtener la victoria es el PP, que parece haber superado su peor momento y ahora es el único partido estatal ‘tradicional’ que conserva un nivel de fidelidad superior al 50%. Ahora bien, todo apunta a que los de Mariano Rajoy obtendrán su peor resultado en más de 20 años, sufriendo un importante desgaste del que Ciudadanos será el principal beneficiario. […]
El PSOE, a pesar de una cierta recuperación, tampoco logrará mantener los resultados del 2011, cuando obtuvo un mínimo histórico. Aproximadamente una tercera parte de su electorado quiere decantarse esta vez por formaciones emergentes, repartiéndose a partes iguales entre Ciudadanos y Podemos, lo que obliga a los socialistas a intentar frenar las fugas de voto por un lado y por el otro.
Ciudadanos ocupa el centro del tablero, ya que muestra una gran capacidad para atraer votantes, no solo del PP y UPD, sino también del PSOE y de la abstención. De hecho, Albert Rivera se erige como el candidato mejor valorado, obteniendo buenas notas de forma bastante transversal, a diferencia de sus rivales.
En cuanto a Podemos, la formación sigue siendo atractiva para sectores del PSOE, Izquierda Unida, nacionalistas y abstencionistas, pero su capacidad de seducción se ha rebajado significativamente. Cabe destacar aquí la figura de Alberto Garzón, al que los votantes de izquierda valoran mejor que al propio Pablo Iglesias y que parece que permitirá a IU mantener un cierto espacio electoral propio.
Esta fragmentación deja algunos de los datos más relevantes de la encuesta, como son las significativas diferencias que se registran por edad y territorio. Así, entre los más jóvenes Podemos se sitúa en primer lugar, posición que en la segunda edad ocupa Ciudadanos, en la tercera el PSOE y entre los mayores el PP. Por comunidades pasa algo similar, ya que cada uno de los cuatro partidos sobresale en algún territorio pero muestra debilidad en algún otro. La noche del 20-D será muy interesante analizar los resultados electorales por comunidades y comprobar cuántos colores acaban componiendo el mapa de España.
En el caso concreto de Catalunya, parece que ERC acabará superando a la marca de CDC en la disputa por el liderazgo del independentismo en Madrid. Pero la división de los votantes soberanistas hará que otras formaciones entren en la batalla para obtener la victoria en Catalunya el 20-D, en una lucha que se vislumbra muy igualada.
En definitiva, los cuatro grandes partidos del país encaran la campaña en un escenario muy igualado, pero el PP parte con una ligera ventaja sobre el PSOE y Ciudadanos, mientras que Podemos parece descolgarse del grupo de cabeza. Aunque los niveles de indecisión no son especialmente elevados, seguimos en un contexto de gran volatilidad, dado que los trasvases de voto que se prevén son de gran magnitud y la competición está muy ajustada. Así pues, la campaña electoral será decisiva para terminar de configurar el resultado final.
Artículo publicado en EL PERIÓDICO DE CATALUNYA el 2 de diciembre de 2015.